El objetivo general de la atención temprana es que aquellas niñas y niños que presentan un trastorno del desarrollo o poseen riesgo de padecerlo reciban una atención a través de la intervención del problema (si ya lo hubiese) y la prevención de los mismos.

Este objetivo general puede concretarse a su vez en diferentes objetivos específicos, que son los siguientes:

• Reducir los efectos y consecuencias de los déficits y deficiencias del niño o la niña en su entorno global.
• Optimizar en la medida de lo posible el desarrollo de todas las áreas del o la menor.
• Aportar medidas de adaptación y compensación al entorno para las necesidades del niño/a.
• Evitar o minimizar los efectos secundarios de una situación de riesgo o un trastorno.
• Atender las necesidades de la familia y proporcionarles información a la misma. Así como, fomentar las capacidades y competencias de la misma ante el desarrollo del niño o niña.
• Considerar al niño o a la niña un sujeto activo de la intervención.
• Planificar acciones de intervención para coordinar a los diferentes ámbitos (social, educativo, familiar y personal).